Los sanos hábitos de dormir pueden ayudar a los niños a sentirse seguros y protegidos. Los patrones de sueño de los bebés cambian constantemente debido a su desarrollo.
Nacimiento a 12 meses | 12 a 24 meses | 24 a 36 meses | |
---|---|---|---|
Lo que se puede esperar | La mayoría de los recién nacidos se dormirán fácilmente. Duermen de 16 a 18 horas al día, pero posiblemente sólo 1 o 2 horas seguidas. Su patrón de sueño puede ser muy imprevisible.
Para los 3 o 4 meses, los bebés posiblemente empiezan a dormir toda la noche. Su sueño tal vez parezca inquieto, con muchos movimientos, tirones, sonidos, sonrisas y acciones de chupar. Pero no se preocupe, ya que todo esto es normal. |
La necesidad de dormir disminuye durante esta etapa. La mayoría de niños de 1 y 2 años necesitan entre 12 y 14 horas de sueño, que incluyen las siestas.
Puede ser que los niños empiecen a pedirle que les lea, y vuelva a leer, uno o más libros favoritos. Para los 12 a 18 meses, muchos niños dejan de dormir la siesta de la mañana y hacen la transición a una más larga por la tarde. |
Los niños de esta edad necesitan 13 o 14 horas de sueño cada día, que incluyen una siesta.
Los niños de 2 años pueden estar listos para una cama más grande. Los niños de 2 años posiblemente intentan posponer la hora de dormir al pedir algo de tomar, más abrazos y besos o “solo uno más” de sus libros. |
¿Cómo se puede crear sanos hábitos de dormir?
- Establecer una rutina de dormir previsible que podría incluir un baño, una alimentación, un cambio de pañal, canciones y libros. La rutina de la siesta será más corta y menos compleja. Esto le indica a su hijo que se acerca el momento de dormirse.
- Siempre acostar al bebé boca arriba y sobre una superficie firme sin almohadas, cobijas, protectores acolchados o animalitos de peluche.
- Acostar al bebé cuando está soñoliento pero todavía despierto. Así aprenderá a dormirse solo.
- Esperar unos minutos para ver si el bebé puede volver a dormirse si se despierta durante la noche. Si no, vaya a verlo pero no suba mucho la luz. Puede ser que esté mojado o tenga hambre.
- Considerar usar una lamparilla baja para ayudar a su hijo a sentirse más seguro.
- Crear un ambiente de dormir tranquilo, oscuro y no muy caliente. No deje televisores, computadoras o aparatos móviles en los cuartos de los niños.
- Fijar horas firmes de acostarse y despertarse—inclusive los fines de semana.
- Ajustar las siestas durante el día para apoyar el horario de dormir por la noche de su hijo.
- Evitar acostar al niño con una mamila.